
El título del ciclo de marzo tiene que ver con una entrevista a Carmen Machí, donde hablaba de un cine hecho con paladar sobre las cosas que nos afectan y pensé que ése es el cine que las mujeres cineastas acostumbran a hacer, con sensibilidad para discernir o valorar una cosa. Así que las películas de marzo suponen una degustación de temas que forman parte de nuestra realidad.
Salvo la última, Siempre nos quedará mañana, que es una producción italiana, todas son españolas.
SOY NEVANKA viene a recordarnos una injusticia y quizá haya supuesto una reparación. Hace 24 años España no estaba preparada para asumir una denuncia sobre acoso sexual y laboral. Y esto nos da perspectiva. Tal vez dentro de 10 años veamos con cara de asombro cosas que ahora tenemos normalizadas. Si nada lo impide, contaremos con la presencia del actor principal Urko Olazabal.
SALVE MARIA, propone mostrar lo que se siente y lo que se espera que se debe sentir. La culpa por no abrazar el rol que se adjudica a la mujer, las dudas, el miedo y esa línea que puede separar el amor del horror.
LOS PEQUEÑOS AMORES. Las madres estamos acostumbradas a cambiar nuestros planes, si no la vida, para ayudar a nuestras hijas, pero resulta más excepcional que una hija lo haga por su madre. Un verano juntas para que una hija se acerque a su madre, esa desconocida que solo parece dar órdenes y mostrarse malhumorada. Celia Rico ya nos había llevado de VIAJE AL CUARTO DE UNA MADRE y con esta película vuelve a mirar en esa dirección.
SIEMPRE NOS QUEDARÁ MAÑANA. Paola Cortellesi, actriz de cine, teatro y televisión, se estrena como directora con una película -en la que actúa- que destaca por la forma y el tono que utiliza para contar una historia mil veces contada, pero aún necesaria porque no está, ni de lejos, superada. Una historia delicada sobre el maltrato y la esclavitud femenina. Avalada por premios de interpretación, Mejor Actriz Principal y de Reparto, Mejor Guion, Mejor Ópera Prima, Premio del Público…David di Donatello 2024. Imposible no verla.
Como cada martes, nos vemos en Perseo.
Eva